Roma, Italia, jueves 25 de Noviembre del 2010. En un contexto de crisis económica y política que no se había visto en este país desde hace mucho tiempo, los estudiantes de prácticamente todas las universidades salen a las calles en protesta por la así llamada, “Reforma Gelmini” (por Mariastella Gelmini, Ministro de Educación). Públicamente, el gobierno de Silvio Berlusconi justifica esta nueva embestida en contra de la educación pública como una medida indispensable para evitar la quiebra de las universidades italianas. Sin embargo, para la gran mayoría de los estudiantes, los dramáticos recortes al presupuesto destinado a la educación en general, y la transferencia de recursos públicos a manos privadas a través de bauchers canjeables por educación, es una medida que, además de profundizar la mercantilización de la educación universitaria, busca revitalizar la economía pasando los costos de la crisis al pueblo.